La casita se puede convertir en lo que queramos, desarrollando las partes que más nos interesen de nuestros pequeños, dejándolo todo a su alcance para que sean ordenados, accedan a sus cosas con facilidad, dejen su creatividad al aire y, sobretodo, disfruten en su pequeño castillo, construido a través de su propia personalidad, con cada detalle pensado especialmente para ellos, su crecimiento y su autonomía.
Una casita versátil que ofrece infinitas posibilidades, funciones prácticas para desarrollar el juego, la lectura, la autonomía y la imaginación.